By using this website, you agree to the use of cookies as described in our Privacy Policy.

La gestión pública y la privada ¿Son fundamentalmente similares en todos los aspectos no importantes? Graham T. Allison.

Mi subtítulo plantea como pregunta la muy citada "ley" de Wallace Sayre. Sayre había pasado algunos años en Ithaca, ayudando a planear la nueva Escuela de Administración de Empresas y Administración Pública, de Cornell. Se fue a Columbia con este aforismo: la gestión pública y privada fundamentalmente similares en todos los as­pectos no importantes.

 

Basó su conclusión en años de observación personal de los gobiernos, un buen oído hacia lo que sus colegas de Cornell (y antes, en la OPA) decían acerca de las empresas, y una minuciosa revisión de la bibliografía y de los datos en que se comparaban las gestiones pública y privada. Sobre esta última, virtualmente no había ninguno. Por tanto, la provocativa "ley" de Sayre fue, en realidad, una invitación abierta a investigar.

1980 Nov 17 Discurso en el homenaje a Marcelo Quiroga Santa Cruz. Juan Rulfo.

De los asistentes al último Encuentro de Escritores Latinoamericanos efectuado en Viña del Mar y en la Universidad de Valparaíso, Chile, en 1970, me impresionó gratamente la persona de Marcelo Quiroga Santa Cruz, tanto por la solidez de sus intervenciones en dicho coloquio, así como la seriedad y certeza con que participaba en los Foros de Valparaíso, no sólo frente a estudiantes, sino ante los obreros y los campesinos más pobres de Chile.

Era quizá también, entre los participantes, uno de los más ecuánimes. Por eso no me extrañó que poco después al subir al poder el general Torres lo nombrara ministro de Hidrocarburos y fuera quien expropiara el petróleo de Bolivia.

Yo lo sabía político, además de escritor, pues tuve la oportunidad de conversar con él en numerosas ocasiones; ya a la hora del almuerzo, o simplemente charlando mientras tomábamos un café en la terraza del hotel O'Higgins y posteriormente en Santiago.

1942 Feb 23 Nota suicida de Stefan Zweig. Petrópolis, Brasil.

“Cada día he aprendido a amar más este país y quisiera no haber tenido que reconstruir mi vida en otro lugar después de que el mundo de mi propia lengua se hundió y se perdió para mí, y mi patria espiritual, Europa, se destruyó a sí misma.

Pero para empezar todo de nuevo un hombre de 60 años necesita poderes especiales y mi propio poder se ha desgastado después de años de vagar sin asiento. Por eso prefiero terminar mi vida en el momento adecuado, justo, como un hombre para quien su trabajo cultural fue siempre la más pura de sus alegrías y también su libertad personal —la más preciosa de las posesiones en este mundo.

Dejo saludos para todos mis amigos: quizá ellos vivan para ver el amanecer después de esta larga noche. Yo, más impaciente, me voy antes que ellos”.

 

 

2017 May 12 La dictadura democrática de los poderosos. Raúl Zibechi

Nos hacen falta ideas. La mente no piensa con información sino con ideas, como destaca Fritjof Capra en La trama de la vida. En esta tremenda transición/tormenta que vivimos, necesitamos lucidez y organización para comprender lo que sucede y para construir las salidas. Cuando la realidad se hace más compleja y la percepción se enturbia, una característica de las tormentas sistémicas, aclarar la mirada es un paso ineludible y vital.

Por eso nos atiborran con información basura, porque contribuye a potenciar la confusión. Es en este sentido que los medios juegan un papel sistémico que consiste en desviar la atención, hacer que las cosas importantes y decisivas tengan un trato idéntico a las más superficiales (un accidente en carretera tiene más cobertura que el caos climático) y tratan los temas serios como si fueran un partido de futbol.

 

1993 Un Gobierno mas efectivo y menos Costoso. Al Gore

  La confianza del pueblo en el gobierno federal nunca ha sido tan escasa como ahora. El estadounidense promedio cree que desperdiciamos 48 centavos por cada dólar de impuestos. Cinco de cada seis personas desean que haya un "cambio fundamental" en Washington. Sólo el 20% de los norteamericanos confía en que el gobierno hace lo correcto la mayor parte del tiempo, a diferencia del 76% de hace 30 años.' Todos sabemos el porqué de esto. Los fracasos de Washington son grandes y muy evidentes. Durante un decenio el déficit ha estado fuera de control. En la actualidad la deuda nacional excede los 4 billones de dólares (US$4.000.000.000.000), XXIIl es decir, US$16.600 dólares por cada hombre, mujer y niño de los Estados Unidos. Empero, el déficit es tan sólo la punta del iceberg. Los estadounidenses creen que bajo la superficie yace inadvertido un enorme derroche. La Secretaría de Defensa tiene en su haber más de 40.000 millones de dólares invertidos en pertrechos innecesarios.? El Servicio de la Renta Interna pugna por recaudar miles de millones de dólares en pagos pendientes. Un siglo después de que la fábrica reemplazó a la granja como la principal actividad económica de los Estados Unidos, la Secretaría de Agricultura todavía opera con más de 12.000 oficinas de servicio al campo, es decir, un promedio de casi cuatro por cada condado de la nación, sea rural, urbano o suburbano. El gobierno federal se muestra incapaz de abandonar lo obsoleto. Sabe sumar, pero no restar. Además, el dispendio no es el único problema. DESCARGAR LIBRO

Página 42 de 46