2018 Octubre 30. EL DICTUM NEOLIBEERAL. José Blanco.
Morena debe estar sacando una lección más de la consulta que efectuó en relación con el NAIM. Los beneficiarios de 40 años de neoliberalismo lo han mostrado una vez más: estarán al ataque permanentemente. Empresarios, medios de comunicación (televisión y prensa), reporteros y articulistas no cejarán: mantendrán un ataque constante contra el nuevo gobierno, para intentar disminuirlo, desgastarlo, impedir el cumplimiento de su propósito de, en beneficio de todos, primero los pobres.
La cuarta transformación no va: ese es su objetivo. Como ha sido y como continuará ocurriendo, tendrán a un gran ejército de voces y plumas argumentando de modo exclusivamente autorreferenciado: sus tesis y sus valores atañen a un sentido común propio de la ideología neoliberal. A esos acendrados militantes les disgusta ser clasificados y metidos en ese cajón, no es extraño. Entre sus valores se halla el individualismo estricto, de modo que cada uno se siente distinto, aunque reconoce a los otros…, siempre que no estén fuera de la razón neoliberal.
En el largo debate sobre el nuevo aeropuerto desoyeron absolutamente los severísimos argumentos ecológicos. Desoyeron el impacto en los pueblos que lo circundan, y el durísimo daño a la vida de la ciudad, maltrecha por unos gobiernos que nunca han pensado en la continua agonía de sus habitantes. Desoyeron la torpeza de asignar millonarios recursos públicos a esa obra (más dinero bueno al malo); se trató, salvo para los ciegos y sordos, de una pésima planeación. Desoyeron el altísimo costo de mantenimiento de unas pistas pantanosas, que recaería, como siempre, sobre los de abajo, debido a las enormes tajadas que absorbería del presupuesto. Nada de lo dicho importa. Dígase si no, que usaron como su máximo cañón argumentativo, el espanto que caería sobre la inversión; claro, no hay dictum más alto para los militantes neoliberales: la inversión y las calificadoras son la final y definitiva razón de ser de la existencia.
1847 Sep 14 – 1848 Jun 12 Cartas recibidas por Guillermo Prieto sobre la ocupación a la ciudad de México por el ejército de los Estados Unidos.
"Guillermo querido":
"Al separamos el 13 de septiembre dejándome encargada tu casa y la traslación de tu familia a Tlalnepantla, casa del señor licenciado CarIo Franco, (?) me encargaste con encarecimiento te refiriese lo que ocurriera en la Capital, por el natural interés que excitaba la situación crítica en que quedó la ciudad.
"Hasta ahora puedo cumplir con tu encargo, y eso, muy imperfectamente, porque ha sido tal la situación de mi espíritu, tan varias y atropelladas mis emociones y tan multiplicados e incoherentes los acontecimientos, que me parece más fácil hacer un retrato dando carreras y haciendo machincuepas el original.
"Noche horrible la del 13; la ciudad estaba completamente a oscuras, se escuchaban tiros en todas direcciones y reventaron tres o cuatro bombas que difundieron el terror.
"Al amanecer el 14, comenzaron a entrar las tropas, las gentes aparecían en las azoteas y en las bocacalles, curiosas, amenazadoras y rugientes.
"Ya recordarás que Tornel (general mexicano) había dispuesto que desempedraran las calles y se amontonaran las piedras en las azoteas, y esto favorecía las intenciones del pueblo, de hostilizar a los invasores.
"Las fuerzas comenzaron a entrar de un modo regular, entre siete y ocho de la mañana.
"Yo sólo vi a tres de los principales jefes (yanquis) , Pillow, alto, seco, mal encarado, y Twis, viejo, fornido, cano y chato, con unos ojos sirgos de malísimo efecto. Scott, alto, gallardo, entrecano, de buena presencia.
"La fuerza de línea, con sus uniformes azules y sus cachuchas, aunque en marcha desgarbada y bausana, no llamó la atención; pero los voluntarios, que eran muchos, formaban una mascarada tumultuosa, indecente, sobre toda ponderación. Muchos habían hecho como a modo de paletó, con sarapes y jorongos; otros, calzaban botas enormes sobre pantalones despedazados y, en materia de sombreros, eran sombreros incontenibles, indescifrables de arrugas, depresiones, alas caídas, grasa y agujeros; ¡oh! los fraques eran una iniquidad.
2018 Agosto 19 Palabras de Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos durante el V Congreso Nacional Extraordinario de MORENA en el Deportivo Reynosa.
Discurso completo
Amigas, amigos
Ha quedado para la historia el proceso que emprendimos en los últimos tiempos enarbolando la bandera de MORENA, que condujo al triunfo político electoral del 1º de julio de 2018.
Esta gesta no se explicaría sin lo andado y sufrido por nuestros antepasados.
No olvidar jamás a los precursores de lo que hoy celebramos. Nosotros sembramos, pero también estamos cosechando el fruto de las ideas, el trabajo y la fatiga de la gente y de líderes de generaciones anteriores.
Recordé algunos nombres en el cierre de campaña, vuelvo a mencionarlos porque omití a varios y debe de irse mejorando la lista de los iniciadores ya fallecidos o presentes: Valentín Campa, Demetrio Vallejo, Rubén Jaramillo, Lucio Cabañas, Genaro Vázquez, Othón Salazar, Alejandro Gascón Mercado, Heberto Castillo, Cuauhtémoc Cárdenas, Salvador Nava, Manuel Clouthier, Arnoldo Martínez Verduzco, Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez, Rosario Ibarra de Piedra, Alberto Pérez Mendoza, Rodolfo González Guevara, Horacio Labastida y Adelita Salazar. También recordamos con cariño a intelectuales y periodistas como José María Pérez Gay, Arnaldo Córdova, Luis Javier Garrido, Hugo Gutiérrez Vega, Julio Scherer García, Sergio Pitol, Carlos Monsiváis, Jaime Avilés, Elenita Poniatowska, Fernando Del Paso, Carlos Payán, Paco Ignacio Taibo II, Rafael Barajas, Pedro Miguel, Carlos Pellicer López, Bolívar Echeverría, Enrique González Pedrero, Víctor Flores Olea, Miguel Ángel Granados Chapa, Enrique Semo, Rodolfo Stavenhagen, Guillermo Bonfil Batalla y otros que habría que agregar.
Cuando la realidad se vuelve falsa. Entrevista con Esteban Illades. Ariel Ruiz Mondragón.
Pese a que la desinformación es una práctica de larga data, en el siglo XXI ha tomado un cariz cada vez más alarmante debido a la velocidad con la que se propaga merced a las nuevas tecnologías, a su perversa utilización política y a las grandes ganancias económicas que brinda.
Las noticias falsas han ido ocupando un lugar cada vez más relevante no sólo en hechos políticos de gran importancia, como la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos o el brexit, sino también en otros ámbitos tan delicados como la ciencia.
Una revisión del estallido de ese tipo de mentiras ampliamente difundidas es la que hace Esteban Illades en su libro Fake News. La nueva realidad (Grijalbo, 2018), en el que presenta desde algunos importantes antecedentes de la desinformación a nivel internacional hasta casos muy actuales en México.
El autor dice en su libro: “Fake News. Una expresión a la que tendremos que acostumbrarnos. Una expresión que nos dice que la realidad, en el siglo XXI, se está volviendo falsa”.
Sobre el libro charlamos con Illades (Ciudad de México, 1986), quien es maestro en Periodismo por la Universidad de Columbia en Nueva York. Editor de Nexos, ha colaborado en medios como El Nuevo Herald, de Miami, Milenio Diario, Chilango, Reforma, El Economista, El Universal y Al Jazeera, entre otros.
2018 AGO 08 PALABRAS DE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR EN LA ENTREGA DE SU CONSTANCIA COMO PRESIDENTE ELECTO DE MÉXICO EN EL TRIBUNAL ELECTORAL DEL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN
Magistradas y magistrados,
Dirigentes de los partidos de la Coalición Juntos Haremos Historia,
Amigas y amigos, todos,
Participo con entusiasmo y solemnidad en este importante acto, en el cual, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, me ha entregado la constancia que me acredita como Presidente Electo.
Antes que nada, rindo homenaje al Pueblo de México por su evidente vocación democrática. Agradezco a los ciudadanos que depositaron en mí su confianza y reconozco la madurez política de quienes aceptaron los resultados electorales.
No cabe duda de que vivimos momentos realmente históricos. Muchas han sido las enseñanzas del pasado proceso electoral, pero considero que su saldo más importante fue la demostración de la elevada conciencia cívica y la sólida dignidad republicana que hemos alcanzado los mexicanos.
Ha sido sorprendente y ejemplar lo acontecido el 1º de julio; nuestra sociedad manifestó su entereza y su talento, y así lo han reconocido otros pueblos, países y gobiernos del mundo.
Ahora nos corresponde asimilar correctamente los sentimientos expresados por el pueblo al emitir el sufragio y ser ejecutores escrupulosos y fieles de ese mandato. Considero que la gente votó por un gobierno honrado y justo. En mi interpretación, la mayoría de los ciudadanos mexicanos están hartos de la prepotencia, el influyentismo, la deshonestidad y la ineficiencia, y desean con toda el alma poner fin a la corrupción y a la impunidad.
Millones de compatriotas aspiran vivir en una sociedad mejor, sin la monstruosa desigualdad económica y social que padecemos. Ha sido muy satisfactorio constatar que incluso los sectores de clase media y no pocos de los más acaudalados manifestaran con su voto el deseo de mejorar la situación del prójimo y su acuerdo en el principio de que el gobierno ha de representar a todos, pero que debe dar preferencia a los olvidados y a los más pobres de México.
Considero que otro de los mandatos de la mayoría es el evitar la violencia, atendiendo para ello las causas que la originan y reformular la política de seguridad, hoy centrada casi exclusivamente en el uso de la fuerza, a fin de construir la reconciliación nacional en el bienestar y en la justicia.
Entre las muchas lecciones del 1º. de julio debo destacar también una que tiene como destinatarios a los dirigentes políticos y a los servidores públicos; es decir, a nosotros mismos: la gente votó para que exista en México un verdadero Estado de Derecho; el pueblo quiere legalidad, no la simulación que en la aplicación de la ley ha persistido desde el Porfiriato.
Los mexicanos votaron también para que se ponga fin a las imposiciones y los fraudes electorales. Quieren castigo por igual para políticos corruptos y para delincuentes comunes o de cuello blanco.
La ciudadanía plasmó en su sufragio el anhelo de que los encargados de impartir justicia no actúen por consigna y que tengan el arrojo de sentirse libres para aplicar sin cortapisas ni servilismos el principio de que al margen de la ley, nada, y por encima de la ley, nadie.
En lo que a mi corresponde, en mi carácter de titular del Ejecutivo federal actuaré con rectitud y con respeto a las potestades y la soberanía de los otros poderes legalmente constituidos; ofrezco a ustedes, señoras y señores magistrados, así como al resto del Poder Judicial, a los legisladores y a todos los integrantes de las entidades autónomas del Estado, que no habré de entrometerme de manera alguna en las resoluciones que únicamente a ustedes competen.
En el nuevo gobierno, el Presidente de la república no tendrá palomas mensajeras ni halcones amenazantes; ninguna autoridad encargada de impartir justicia será objeto de presiones ni de peticiones ilegítimas cuando esté trabajando en el análisis, elaboración o ejecución de sus dictámenes y habrá absoluto respeto por sus veredictos.
El Ejecutivo no será más el poder de los poderes ni buscará someter a los otros. Cada quien actuará en el ámbito de su competencia y la suma de los trabajos respetuosos e independientes fortalecerá a la República y el Estado Democrático de Derecho transitará del ideal a la realidad.
No olvidemos nunca que debemos la apertura de estos nuevos horizontes al pueblo, al pueblo soberano que está por encima de individuos, grupos o facciones, por poderosos que sean o que parezcan.
En la elección del 1º de julio quedó demostrado que así como el autoritarismo y la abyección envilecen y desprestigian a las instituciones, la voluntad democrática de la ciudadanía puede renovarlas y fortalecerlas.
No desaprovechemos o desperdiciemos este momento de condiciones políticas inmejorables para llevar a cabo la cuarta transformación de la vida pública de México. El pueblo ha conquistado con energía y dignidad su derecho indiscutible e indiscutido de regir sus propios destinos y de ser gobierno.
Contamos con amplias bases de legitimidad para hacer realidad el deseo colectivo de vivir en paz, con justicia y libertad.
Sólo me resta decir que actúo guiado por principios y soy perseverante. Ninguna tentación me quitará la autenticidad o desviará mí camino en la búsqueda del humanismo y la fraternidad.
Reitero: voy a cumplir todos los compromisos de campaña, no le voy a fallar a los ciudadanos y habré de ser fiel en todos mis actos al interés, la voluntad y el bienestar del único que manda en este país: el pueblo de México.
¡Que viva la cuarta transformación del país!
¡Que viva la nueva república!
¡Que viva la voluntad soberana del pueblo!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!
Ciudad de México, 8 de agosto de 2018
Más artículos…
- EXPOSICIÓN DEL PRESIDENTE EVO MORALES ANTE LOS JEFES DE ESTADO DE LOS PAÍSES PRODUCTORES DE PETRÓLEO.
- 2018 Julio 12 Carta de AMLO al Presidente Donald Trump.
- 2018 Julio 4 COMUNICADO DE WIKIPEDIA
- 2018 Junio 27. Las Campañas presidenciales en el Siglo XX mexicano. Trabajo recepcional presentado para ingresar como socio activo a la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística.
Página 27 de 46